jueves, 23 de enero de 2014

Humana coincidencia



Debería decirle
a las coincidencias,
que no existen.
 

(aunque ya lo sepan)

Aún el azar,
me diagnostique escéptica.

Aún viva el presente
y me recuerden el pasado.

Yo lo creería,
y las coincidencias
perderían su catarsis,
se ahorrarían

                     el espanto.

Al menos, las indeseables.

 Que todas son
parte ya de este   des-tino.

Cuando
no quiera saber de ti
al menos, dejen una
advertencia.

Así la hora, lugar, espacio
no sea incluso
un recordatorio.

De todo lo que te extraño.

América Zapata

jueves, 9 de enero de 2014

Emancipación de los recuerdos

 

La derrota libera,
 no habrá lucha. 

                        No más.

                     Léeme derrotada.

Amando la independencia 
que siempre tuve. 

-Verme estrellada
en el mito que estéreo-tipa.
 Verme rota. Verme catártica, 

insomne-

 Una asesina
que ametralla 
el silencio de ti.

Esta sangre derramada
deconstruye 
la sed del mito,
rechaza sus verbos, 
que sobre escriben
la inexperiencia.

 Mi lucha será,
a cambio, la libertad. 

Te desato del vértigo
que me quita la piel;
de la desesperación.

Del nudo que asfixia el presente.
Del torrente miedo,
lluvia de lodo. De evitar 
al amor y hacerlo de lado.

 Encuentro la llave de tú cárcel,
la mía;
que en el orgullo 
me condenan.
Me provocan.
Te Disfrazan, Me dominan.
Me pierdes. Me alejas, me lastimas.

 Te libero de mis miedos y te doy
a cambio la mirada del espejo.
Moraleja de los tiempos:
el espejo es antihistamínico.

 Te fumo.
tiro, 
  el discurso de verte roto, 
    el de precaución, 
       el del intento.

 Te libero

 No habrá más nombres en el carmín
de nuestros labios.
Aún sea tarde.

 Alejaré al miedo que te reconoció,
incluso de estos versos,
sin métrica.

 Locos, Exacerbados 
amarte en poesía, libre
es purificar la experiencia.

Reafirmar mis respuestas
mi no y mi sí, mi tal vez.

Porque siempre fui leal
A la verdad.
Me libero del sí que no dije.
Porque de las mentiras 
comen los ignorantes. 

 Decírtelo hueco
me sentencia.

  Me libero de lo que no pude decir,
de mi torpeza al hablar.
Discúlpame
por tanta niebla.

De pre-ocuparme,
de leerte falso.
 De las cadenas amorosas
a las que no pertenezco.


Te vivo revolucionando
la distorsión de la alevosía.


 Te libero de verte
cargando hologramas.

No habrá ficción, habrá vida.
Me pudre  la  alevosía 
porque sentencia al amor.
a la soledad, 
es el caldero del capitalismo. 

 Te libero de tus narcisistas
Inseguridades.
A  esta perdida, no la querrás 
ver en el ego de tu pedestal.

 Prefiero verme encarcelada
que sumisa.
Reforzar  tus inseguridades, 
sería mi desamor. 

Mi reflejo…
                          
Mas alimentaré tu sueño,
hasta la última consecuencia.

 He visto necesario
hacer un recuento
a mi falta de táctica;

Me reúso a manipular
tus debilidades
para ser aceptada.

 Hay que escarbar en las tumbas
para ver cómo 
se esconden las mentiras.

 Yo me dejo desnuda
porque así recibo el amor 

Me verás inmune a ti
y me amaras libre.

Dejar el dolor para otros.
Te absuelvo de este fracaso.
de los tuyos, 
aún seas tú único gobierno 
y yo no pueda emanciparte.

 Aún no sea fracaso.

 Me olvido de las órdenes
de la generación. 
Le quitaré telarañas
al vicio de mis labios.

No habrá una tejedora
de recuerdos.

Habrá un panal de sueños.
La sangre, será la miel 
que envolverá tu rencor,
para quitarte de pendejadas. 

 Te reconozco sin que tires
del arco de Ulises. 

Te reconozco con un gesto y ya.

 El equilibrio. Mi empatía

 Me emancipo de mis recuerdos
para quererte en la ausencia
en la perdida, el olvido, 
la falta del deseo,
las heridas, el odio. 

 Aún con el todavía tatuado
Con bipolaridad.
Con la mierda de la desaprobación
Con el dolor en el pecho.

Si me emancipo sabré que te quise.
Maldita sea que te amo. 
Sabré que no fui,
no seré,
 la cosificación de los recuerdos.

Le he declarado la revolución a mi ego.

 Porque no es fácil,
 el duelo de los pulmones.

Aún, me haya,
te hayas despedido.

América Zapata